Terapia de tejidos blandos

El tratamiento de las hernias deportivas es un desafío. La rehabilitación exitosa requiere un enfoque integral que involucre la movilización de tejidos blandos. Muchos métodos actuales de rehabilitación se centran en fortalecer los músculos profundos del abdomen para estabilizar la pelvis, pero esta estrategia puede ser insuficiente a largo plazo.

Un punto clave en la prevención de estas lesiones radica en una evaluación exhaustiva del movimiento y la estabilidad de la cadera. Los desequilibrios en los patrones de movimiento, como la falta de rotación interna de la cadera, pueden predisponer a los atletas a sufrir hernias deportivas. La rehabilitación debe incluir progresiones de ejercicios, con un énfasis en la movilidad activa y el trabajo multiplanar para fortalecer los músculos afectados.

Single Leg Squat Test (SLST). Fuente imagen: OrbisHealth (elaboración propia)

Evitar la cirugía a menos que sea absolutamente necesario y no subestimar la importancia del tratamiento de tejidos blandos son aspectos clave en la gestión de las hernias deportivas. La incorporación gradual de ejercicios de alta velocidad y contracciones concéntricas es fundamental en la fase final de la rehabilitación. La rehabilitación inadecuada o la falta de atención a los tejidos blandos puede llevar a una reincidencia de la lesión.